En un mundo donde la movilidad y las conexiones globales son cada vez mayores, la ciudadanía sigue siendo una de las grandes cuestiones políticas de nuestro tiempo. Desde las teorías clásicas hasta las experiencias personales contemporáneas, se han venido desplazando las fronteras entre quienes poseen la nacionalidad del territorio en el que residen y quienes no, creando nuevos espacios, nuevas políticas y nuevas formas de entender los mimbres de la sociedad. La ciudadanía, y todo lo que ella comporta, evoluciona rápidamente, y su importancia es hoy mayor que nunca.

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En este número, prestamos atención a las dinámicas políticas de la adquisición y la negación de la nacionalidad; y a las formas de forjar y explorar los lazos de pertenencia a una diáspora, una comunidad migrante, y una sociedad receptora. También analizamos dos nuevas políticas que han despertado duras críticas: las leyes que permiten la retirada de la nacionalidad, y los programas públicos de venta de nacionalidad a grandes inversores. Este número se fija en dos contextos particulares, en los que la identidad y el arraigo se recomponen y se reinventan: la cabina de un avión, y un pueblo de las montañas en Euskadi. Indagamos en los sistemas de ciudadanía de Turquía, Líbano y Emiratos Árabes Unidos, y sus consecuencias para las políticas de naturalización y el acceso a derechos y beneficios económicos. En todas estas situaciones, la ciudadanía, el estatus legal y la pertenencia a la comunidad son terrenos de disputa, en donde las posturas de gobiernos, ciudadanos y residentes no siempre coinciden.

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